Primera reunión del Comité de Pronóstico de SAN
La titular de SESAN, Maritza Méndez de Oliva y miembros del Comité de Pronóstico de Seguridad Alimentaria y Nutricional, llevaron a cabo su primera reunión de manera virtual, con el objetivo de analizar el comportamiento de las variables relacionadas con la Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN).
César George del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH), presentó la perspectiva climática para el trimestre mayo, junio y julio de 2020: a) Arriba de lo normal: Boca Costa, Sur-Occidente, Franja Transversal del Norte; b) Normal: Departamento de Petén, Región Caribe, Meseta Central, Oriente, Sur-Oriente y Litoral Pacífico. Para el resto del país se esperan condiciones normales de lluvia. Respecto al fenómeno de El Niño, para el período mayo, junio y julio, los modelos internacionales predicen condiciones neutrales (65%), esta situación favoreció un inicio normal de la estación lluviosa en el país en el presente año. Sin embargo, no se puede descartar la generación de un evento de La Niña.
Respecto a la canícula que se presenta en julio, George opinó: que ésta no podría ser tan prolongada, sin embargo, falta un mes para saberlo con exactitud. “Se espera la formación de 14 a 16 tormentas tropicales, no todas afectarán al país. A corto plazo, no se espera un sistema tropical que sea de peligro para el país, solo lluvias normales de la época”, agregó.
Posteriormente, Gustavo García de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), socializó los precios y reservas de granos básicos. Los precios del maíz y del frijol negro en mayo, son mayores a los precios reportados en abril. Los precios continuarán al alza en los meses de junio a agosto del presente año.
Juan Roberto Mendoza, coordinador del Comité de Pronóstico de SAN, expuso la perspectiva de SAN en el marco del Hambre Estacional y COVID-19 y el efecto de las medidas de contención por la pandemia. Informó que las medidas de contención relacionadas con el COVID-19, han impactado negativamente en el acceso a los alimentos para los hogares pobres que dependen de la economía informal y las remesas.
“Los hogares han experimentado una reducción en sus ingresos debido al cierre de negocios y otras fuentes de empleo. Los efectos del Hambre Estacional y las medidas de contención relacionadas con el COVID-19, incrementan la inseguridad alimentaria. En abril OXFAM reportó incremento de 57% en los casos de desnutrición aguda en Chiquimula, mientras que en junio, PROGRESAN-SICA reportó 100% de incremento en los casos de desnutrición aguda en la Región Chortí (Chiquimula) y la Microrregión Guija (Jutiapa). Sin embargo, debido al cambio que realizó el MSPAS en la metodología para reportar la desnutrición aguda, no se puede estimar la magnitud del incremento de los casos de desnutrición aguda en niños y niñas menores de cinco años”, agregó Mendoza.
Ricardo Ramírez de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED), presentó el Protocolo Nacional por Canícula Extendida de Guatemala y explicó: “INSIVUMEH informa el pronóstico de la temporalidad de la canícula; el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) realiza un monitoreo de cultivos y el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) realiza vigilancia de la Desnutrición Aguda, cada instancia genera un informe. Los informes de cada institución son enviados al Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (CONASAN) y si ocurre prolongación de la canícula, el Consejo es el ente especializado que realiza una recomendación específica a la SE-CONRED para que pueda emitirse un estado de alerta roja a nivel nacional para desarrollar acciones interinstitucionales”.
Durante su intervención la secretaria de Seguridad Alimentaria y Nutricional resaltó: “Hemos percibido que no se visibiliza el impacto de las pérdidas económicas en la SAN. Debemos hacer visible que las medidas de contención relacionadas con el COVID-19 ha empeorado la situación de inseguridad alimentaria que ya existía, esta situación incremente los casos de desnutrición aguda en niños y niñas menores de cinco años”.
“Tenemos 3 meses en los que se ejecutarán los Programas Sociales por COVID-19, nos preocupa lo que sucederá después, debemos pensar cómo abordar la situación y prepararnos desde este momento”, concluyó Méndez de Oliva.
A través del encuentro se acordó que los miembros realizarán un análisis de situación de SAN y de brechas, evidenciando la población que queda fuera de los programas sociales por COVID-19, mismo que se discutirá en la próxima reunión que se realizará en la primera semana de julio.
El Comité de Pronóstico en SAN es coordinado por la SESAN y está integrado por: el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA); Ministerio de Desarrollo Social (MIDES); Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS); Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH), Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres SE–CONRED, Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO); Acción Contra el Hambre (ACH); Red de Sistemas de Alerta Temprana contra la Hambruna (FEWS NET), OXFAM, Universidad Panamericana y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
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